BILLY GIBBONS VUELVE EN SOLITARIO
El que fuera líder de los míticos ZZ
TOP, el guitarrista Billy F. Gibbons, continua su carrera en
solitario editando su segundo disco bajo el titulo de The big bad blues. Editado
a través de la compañía Concord Records, este segundo trabajo se
centra mucho mas en sus raíces, en el blues, el rock y como no, en el country. El álbum está compuesto en su mayoría por
canciones originales y unas cuantas versiones de viejos clásicos de Muddy Waters, Jerome Green
y Bo Diddley, además ha sido coproducido junto
con Joe Hardy, que ya trabajó con él su
grupo los ZZ TOP, que además también ha colaborado tocando el bajo,
junto al baterista Matt Sorum,
el guitarrista Austin Hanks, y finalmente James Harman tocando la armónica. Este nuevo trabajo
está plagado de buenos ritmos, donde el blues y el country son la esencia
principal del álbum, ya que en sus once cortes encontramos grandes dosis de
estos estilos. El disco se inicia con el tema Missin’ yo’ kissin’. Un
blues al más puro estilo sureño, donde las guitarras tirando de slide son una
de las grandes bazas de este corte, además la armónica y la batería también
juegan un gran papel. Seguidamente nos encontramos con My baby she rocks, otro gran blues pero en clave de medio tiempo, donde de nuevo las guitarras
son la clave de todo el ritmo haciendo que sea un autentico blues oscuro y llorón.
Después viene Second line, mucho más rápido y rítmico aparece este
nuevo corte donde el rithm & blues es la principal clave de un corte
de estilo country sureño, el posee buenas guitarras y buenos ritmos. Tras este
aparece Standing around crying,
primer homenaje a su artista favorito, Muddy Waters y que con un típico punteo de
guitarra se inicia este corte baladista y bluesero, donde de nuevo el blues en
su más pura esencia hace acto de aparición, ofreciendo otro medio tiempo suave,
llorón y armonioso. Seguimos con Let
the left hand know, con un
ritmo más rápido y rockero aparece este corte donde la voz de Gibbons esta más castigada y ronca, pero que a la
vez conjunta perfectamente con los demás instrumentos sobre todo con la
harmónica que este corte tiene más presencia. A continuación nos encontramos
con la canción Bring it to Jerome, una versión de Bo Diddley, el propio Gibbons
hace suya creando un nuevo blues en su más pura esencia, principalmente porque
contiene todos los ingredientes del autentico blues rock. Tras este pasamos al
siguiente tema llamado That’s what she
said, otro corte de rhitm &
blues sureño, pero con un ritmo algo más pausado, pero con buenos punteos y
magnífica ejecución por parte de los instrumentos. Mo’ slower blues y Hollywood
151, son los dos siguientes temas en aparecer siendo el primero otro
gran blues donde el tintineo del piano casa perfectamente con la armonía del
corte, mientras que el segundo es mucho más rápido y veloz, recordando mucho a
los buenos temas de ZZ TOP. Seguimos con su primer single titulado Rollin’ and tumblin’, otra de las
versiones de Muddy Waters, que en este caso
hace suya imprimiéndole un ritmo más veloz y country sureño con buenos golpes
de batería y magnificas guitarras. Y para terminar aparece Crackin’ up, un corte fresco y
veraniego, que tal vez se sale del estilo principal del álbum, pero como en
casi todo la excepción confirma la regla. En definitiva un disco cargado de
grandes dosis de rock tejano y country sureño, además de autentico y buen
blues. Tras varias escuchas del álbum hay cortes que ya se quedan en la
memoria, sobre todo si eres un buen amante del blues rock. Solo esperamos que
si decide hacer una gira por Europa, no se olvide de pasar por estas tierras
perdidas de la mano de Dios, seguro que será todo un placer verle en directo y
disfrutar de su buena música.
Y este es el video de su single, disfrutalo...