LO ULTIMO DE LENNY KRAVITZ
Hace muy poco tiempo que el neoyorquino LENNY KRAVITZ, ha editado su decimo disco de estudio bajo el titulo de Strut. Editado por la compañía Roxie Records. Este nuevo trabajo se deja de ambiciosas pretensiones, de intentos de mensajes sociopolítico y menos aun trata de aunar las culturas musicales de blancos y negros, además tampoco intenta meter a presión el rock, el soul, el funky o Rymth and blue, sino que hace una pequeña mezcla de todos estos estilos creando un disco muy dispar, pero que en la esencia principal su contenido es puro rock. Cosechando malas criticas por parte de la prensa especializada que lo tachan de mediocre y repetitivo, este nuevo disco posee catorce temas al puro estilo rock, aunque también mezcle otros estilos. El álbum se abre con su primer single titulado Sex, un inicio muy funky con un buen sonido retro y con un Groove muy interesante, además también posee un estribillo bastante pegadizo y sensual. Seguidamente aparece el segundo tema titulado The chamber, con un bajo muy particular y una melodía un tanto relajada crea un tema muy armonioso, rico y atractivo, siendo muy similar a la línea de los años 70’s. Tras esta viene Dirty white boots, un tema donde la guitarra gana mucho, así como el ritmo de la batería con una base constante, además se aprecia un buen punteo de guitarra, que marca la diferencia en el tema. Seguidamente nos encontramos con el corte New York city, un corte dedicado a su ciudad natal con un ritmo bastante funky acompañado de un buen bajo, además de la aparición del saxo y buenos coros, posiblemente pueda ser una de las mejores canciones del disco. Después tenemos el siguiente corte titulado The pleasure and the pain, un balada al mas estilo blues con una guitarra muy buena y unos coros de soul muy bien puestos, consiguiendo un líneas vocales con mucho feeling. Tras este viene el tema que da titulo al disco llamado Strut, el cual es un corte muy macarra, rockero y pegadizo, de hecho la estrofa sigue un patrón de rock clásico dando la sensación de haberlo escuchado antes, pero con un ritmo agradable al oído. Otro corte es Frankestein, siendo tal vez el más diferente del disco, este contiene un fraseo casi incompleto dentro de un tempo algo calmado con una armónica excelente y saxo muy bueno. La guitarra acústica da inicio al siguiente tema titulado She’s a beast, un medio tiempo country donde la guitarra esta muy bien posicionada y sobre todo bien acompañada de varios instrumentos de cuerda, haciendo una balada muy buena. I’m a believer, es el siguiente tema con un ritmo mas pegadizo donde la guitarra es la que lleva el peso de la melodía, además de ser muy fresca y dinámica. El siguiente corte podría llevar a engaño ya que su titulo es Happy birthday, pues nada tiene que ver con lo que conocemos, sino que se marca un blues autentico lleno de buenas guitarras y una base rítmica muy blusera y pegadiza, aunque el estribillo sea el tan conocido "feliz cumpleaños". Seguimos con I never want to let you down, una nueva balada cargada de buenas guitarras y un sentimiento soul por parte de Lenny excelentemente cantado. Y para cerrar el disco aparece Ooo baby baby, otro medio tiempo que recuerda mucho a los temas que se hacían otras épocas, ya que el soul que emana hará disfrutar a los mas nostálgico. Y como bonus track, no encontramos con dos cortes el titulado Sweet gitchey rose, contundente, rockera y sensual. Y Can’t stop thinkin’ bout you, siendo un tema tranquilo y con una onda de soul y funky clásico. En definitiva, un disco cargado de grandes dosis de funky, soul y sobre todo rock, que harán las delicias de sus fans. Además si estas cansado de las modas y quieres disfrutar con buenas mezclas de rock y grandes dosis riqueza musical, no dudes en escuchar este disco, porque seguro te gustara.
