IRON MAIDEN VUELVEN CON NUEVO DISCO
Después de
un largo periodo de tiempo, los británicos IRON MAIDEN, han vuelto a
salir a escena con su nuevo trabajo llamado “Senjutsu”. Con un
secretismo impresionante, la banda ha vuelto a grabar en los estudios parisinos
este nuevo trabajo con la formación al completo, siendo además Steve Harris el mayor exponente de este álbum, ya
que además de aportar su sabiduría como bajista también ha sido el artífice
principal en la mayoría de las composiciones de este disco. Un disco doble,
debido a la larga duración de los temas, que compaginados con aquellos algo más
cortos suman un total de 80 minutos cargados de grandes dosis de heavy puro,
melódico y en ocasiones hasta progresivo. Este doble trabajo contiene seis temas en su primer
disco y cuatro en el segundo, dando comienzo con el tema que da título al álbum
llamado Senjutsu, que se inicia con timbales japoneses y un riff de
guitarra cortado siendo de corte épico y potente donde todos los instrumentos
parece encajar a la perfección, aunque al ser un corte algo largo se torna un pelín
pesado, sobre todo por el ritmo algo lento de su batería, pero sin dejar de
lado el trabajo impresionante que hace Nicko McBrian.
Seguidamente aparece un corte que ya se lanzo como single titulado Stratego,
un corte mucho más corto que el anterior, además de poseer un ritmo más rápido
y potente, donde se nota la esencia principal del grupo. Con una estructura de
batería, bajo, guitarras y punteo hacen que sea uno de los temas más potentes
del disco. A continuación aparece el que sería su primer single lanzado con
video incluido bajo el titulo de The writing on the wall, y
que comienza con una guitarra española, para seguir con un riff de guitarra muy
pegadizo, que da paso a la potente voz de Bruce
Dickinson, que a pesar de todos sus achaques, sigue demostrando que una
de las grandes voces del heavy. Un corte impresionante donde la melodía westerns
junto con el estribillo y el puntero central forman uno de los temas más
pegadizos de todo el álbum, además su composición corrió a cargo de Bruce Dickinson y Adrian
Smith. Después de este aparece el corte Lost in a lost world, con
aires de balada country este tema se inicia con
una suave voz de su vocalista, para pasar a un riff muy guitarrero y
potente donde el ritmo sube estrepitosamente para converse en un corte típico
de la banda, donde el ritmo es bastante progresivo y típico Maiden. Seguimos con el corte Days
of future past, es otro de los cortes cortos y potente que posee este
trabajo donde Adrian Smith se recrea con el
riff principal, pero que da paso a que cada guitarra ejecute los matices melódicos
a su manera y las tres guitarras suenen compaginadas y bien estructuradas,
además la aportación del sintetizador antes del coro final aporta algo novedoso
y curioso a la vez. Y para terminar este primer disco aparece el corte The time
machine. Tal vez este sea el temas más progresivo de todo el álbum,
pero con buenos ritmos entrecortados con cambios ascendentes, y donde de nuevo
la voz de Bruce en un principio junto a las guitarras
de Janick Gers,
Dave Murray y
demás componen duelos, melodías de guitarras, riff acústicos y diferentes
sorpresas protagonizadas por los conductores de las seis cuerdas, donde
finalmente el temas vuelve a caer en ritmo dando paso al acorde final. Una vez
terminado este primer disco, comienza la segunda parte donde la primera canción
es la llamada Darkest hour, una balada de carácter épico que vuelve por los derroteros de la historia narrando parte
de lo sucedido en la segunda guerra mundial y que Bruce
se pone en la piel de Winston Churchill, y
donde la guitarra de Adrian Smith hace un
trabajo impresionante con un punteo extraordinario. Seguidamente viene el corte
Death
of the celts, este es el primero de los temas más largos del disco, que
comienza con el clásico bajo y guitarra, pero envuelto con un sonido de
teclados que dan paso a la entrada del vocalista cantando en una línea folk, melódica
e instrumental que se va creciendo en intensidad según avanza el tema, que a lo
largo de su duración contienen distintas fases, desde aumento de ritmo hasta
fases completamente instrumentales, creativas, donde la batería esta pletórica
así como los demos instrumentos. Después viene el segundo tema de los tres
últimos que fueron compuestos por Steve Harris en solitario, llamado The parchment.
Iniciándose con un solo de bajo para seguir con una guitarra limpia hasta que
aparece la batería y las demás guitarras que servirán de eje principal del
tema, hacen que sea uno de los temas más épicos de todo el disco, sobre todo
por la combinación de voz, bajo y guitarras cargadas de una importante carga
instrumental creando uno de los mejores temas de todo el álbum. Y para terminar
este doble álbum, llegamos a su último tema llamado Hell on earth, que de
nuevo vuelve a iniciarse lentamente hasta que rompen la batería junto con las
guitarras, pero con un ritmo superior a los temas anteriores donde de nuevo las
tres guitarras vuelven a demostrar el ¿por qué? están ahí. Por otra parte
también hay que decir que el protagonismo de Harris
es sobresaliente, así como el de Dickinson y Smith notable, mientras que el de Gers y Murray, en
menor medida están por encima del bien. En definitiva, considero y bajo mi
punto de vista, que es un álbum para disfrutar escuchándolo con tranquilidad y
degustar lentamente los distintos matices que posee, ya que no hay canción en
el álbum que no tenga oculta una melodía que en la primera o segunda escucha no
hemos oído, principalmente porque es un disco donde los tintes rockeros y
heavies tanto en velocidad, así como, en agresividad han dado paso a la mesura,
la progresividad metalera y el buen gusto para poder disfrutar de todas y cada
una de los melodías que posee. Solo esperamos que si deciden salir de gira para
presentar este álbum, vengan por estas tierras y disfrutemos de sus canciones
encima de un escenario.
Y este es el video de uno de sus primeros singles. Disfrutalo...